La fotografía publicitaria expresa deseos y necesidades. Para obtener un buen resultado es imprescindible cuidar la calidad y la estética, consiguiendo ser comunicativo de tal forma que te permita llamar la atención de tu público.
En la fotografía publicitaria, el fotógrafo profesional tiene un control total sobre la iluminación, elemento que la permite diferenciarse del resto de especialidades como la Fotografía de Interiores o Industrial, siendo la clave para lograr imágenes de gran calidad.
Además, atendiendo a las dimensiones de los productos y a los materiales que los constituyen, surgen especialidades de Fotografía Publicitaria con requerimientos de espacios, equipos y experiencia muy específicos.
Los tipos de mensajes que constituyen la Fotografía Publicitaria son dos. Por un lado están los denotativos, es decir, aquellos representados mediante una imagen y acompañados de un mensaje sencillo y entendible. Por otro lado los connotativos, representados mediante imágenes con un mensaje más codificado que oculta la idea.
Los principales atributos que debe presentar la Fotografía Publicitaria son el impacto visual, el concepto creativo y conseguir promover la acción de compra. La finalidad del impacto visual es atraer la atención del púbico al cual está dirigida. El concepto creativo hace referencia a la habilidad para transmitir la idea principal que el anunciante desea y también crear deseo de adquisición despertando interés suficiente para que estimule la compra. Finalmente, tiene que promover la acción de compra, es decir, además de tener capacidad para llamar la atención propicie su compra.
El objetivo fundamental de la Fotografía Publicitaria es conseguir una imagen sugestiva y atractiva del producto, para lograrlo es imprescindible emplear una iluminación adecuada. Dentro de la fotografía publicitaria existe un sinfín de formas de iluminación, encuadres y atrezzos que se pueden utilizar.
Las fases que se desarrollan dentro de la Fotografía Publicitaria son tres. La preproducción, en la cual se recopilan todos las elementos que van a intervenir en el proceso de producción. La producción, que consiste en la realización del trabajo fotográfico. Por último, la postproducción que es en la fase que se genera un resultado final para que sea aplicado en el medio publicitario que se desee.
Según estudios realizados, las páginas web con fotografías que reflejen una buena imagen del producto ofertado y de la empresa reciben un mayor número de visitas que aquellas que no vierten este tipo de contenido. Además cuando las imágenes están hechas por profesionales de este campo se logra que tanto el negocio como los productos que se recogen en ellas transmitan una mayor confianza al consumidor. Como dice la editora fotográfica de The New York Times Magazine, Kathy Ryan: “La fotografía de calidad sigue y seguirá atrapando la mirada del espectador”.
La Fotografía Publicitaria es un campo tan amplio que es necesario contratar a fotógrafos profesionales especialistas en determinados campos o productos, desde Agencia MonoGráfica trabajamos diariamente para realizar la Fotografía Publicitaria para pequeñas y medianas empresas, no dudes en ponerte en contacto con nuestro equipo.
